La Coordinación considera que terminó la “trama montada” por el pacto de corruptos, dirigido por el presidente Giammattei, al elegir para un nuevo periodo a la señora Consuelo Porras, principal “alfil” de dicho pacto, quien únicamente se ha dedicado a frenar investigaciones por corrupción e impulsar causas espurias contra periodistas, fiscales y jueces. Durante su primer mandato incrementó la criminalización, detenciones arbitrarias, impunidad y facilitó la corrupción.
El presidente Giammattei, hizo caso omiso de los llamados de diferentes segmentos y sectores de la población, de igual manera de la comunidad internacional, para que eligiera a una persona idónea, proba, capaz, se decidió por protegerse – y al resto de los que integran el pacto de corruptos-, por investigaciones de corrupción, garantizando impunidad plena.
Con esta decisión, se terminará de “acabar” con el Estado de Derecho, la incipiente democracia guatemalteca, aumentará la criminalización, judicialización principalmente de defensores/as de derechos humanos y, el irrespeto de los derechos humanos.